📍“Continuamos recomendando la utilización de tapabocas, pero desde el 7 de abril será optativo su uso en espacios laborales, recreativos y educativos. En el transporte público seguirá siendo obligatorio” dijo el ministro de Salud de PBA, el miércoles 6/4.
📍Desde entonces se vivió una serie de idas y vueltas que demoraron su implementación e, incluso, no rige todavía plenamente.
El primer escollo fue la falta de una comunicación oficial a los colegios por parte del gobierno de PBA.
📍El 12/4 llegó a los padres la información sobre el alcance de la medida. Ahí se produjo el otro problema que fue el de la interpretación.
📍“Cada colegio está haciendo una interpretación de la resolución, según el pensamiento o la ideología de la autoridad de turno. La norma dice que es opcional y, en todo caso, la decisión debe pasar por cada familia y no por la escuela…” señalaron desde PO.
📍Mientras tanto, sigue generando un daño irreparable en el proceso de aprendizaje de los alumnos.
📍Tanta confusión se produce mientras la gobernación está en un proceso de compra directa de 90 millones de barbijos, por un monto de $772 millones.
📍No sólo se cuestiona el mecanismo de compra directa en lugar de licitación, sino el momento en hacerla: la llegada de barbijos a los colegios será mucho después del comienzo del ciclo lectivo y cuando la provincia decidió el fin de su uso en escuelas.
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