Infobae
9/01/22
En 2020 se anunció que todos pasarían de grado; luego, que 2020 y 2021 se evaluarían en conjunto y aprobar el último semestre 2021 era aprobar los dos.
La escuela argentina condena a los más desfavorecidos a la ignorancia con una inclusión mal entendida. Acá no hay grieta: el plan Aulas de Aceleración es de 2018, gestión de María Eugenia Vidal.
Argentina tenía un sistema de secundarios nocturnos bueno hasta 2010 cuando llegó FinEs2 (Finalización de Estudios), un secundario de baja categoría, malos contenidos, cursada y evaluación. Secundario en 2 años y medio, 2 encuentros semanales en locales sociales, muchas veces partidarios. El FinEs vació los CENS (Centros Educativos Nivel Secundario), bachilleratos de adultos “en serio” de 3 años con programas de secundario regular, condensados, con cursada rigurosa.
Otro golpe a los CENS fue la decisión de crear las Aulas de Aceleración: para que los que abandonaron puedan inscribirse en 4° de secundario, según su edad, se les da en un año los tres primeros años del secundario, comprimido, mezclados con alumnos que cursaron los años previos o lo hicieron parcialmente. La “aceleración” se hace en detrimento del contenido y el aprendizaje.
Para justificar la decisión, se cambia la educación por grados por “multigrados”, el saber circula (no se enseña), hay “participantes de la situación didáctica” (y no maestros y alumnos) que se “vinculan con el saber de diferentes formas”.
En la evaluación también hay “sarasa”. Es posible imaginar la flexibilidad que se esconde detrás de un discurso que busca “disminuir la visión estanca que constituyó la estigmatización inconciente/conciente del alumno con desfase cronológico como académico.”
Este es el argumento central: el alumno que no pasa de año es discriminado. Esta deconstrucción de la escuela es la nueva excusa de quienes vienen fracasando estrepitosamente. La renuncia a enseñar, descalificación del docente, vaciamiento de contenidos, la pretensión de que se puede formar conciencia crítica sin aprender de modo riguroso, son, en el fondo, una renuncia a “educar”. Los funcionarios también presionan a los docentes para que promocionen a todos.
La nivelación para abajo también llegó al ámbito docente, con profesorados en los que alumnos del primer año no están completamente alfabetizados, y no comprenden consignas simples ni textos básicos.
Un docente explica: “el deterioro es constante y es una política, más allá de quién gobierne… Al profesor… se lo degrada [y se lo pone] a la par del alumno… No se puede penalizar, desaprobar, dejar libre. Chicos de 5° año dan respuestas de primer grado, en tres renglones. Pobrecito… aprobado.”
https://www.infobae.com/educacion/2022/01/09/aulas-de-aceleracion-o-como-hacer-3-anos-en-uno-otro-mecanismo-facilista-para-alumnos-secundarios-atrasados-en-la-cursada/
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